domingo, 1 de agosto de 2010

Gocta

Llego a Yurimaguas, paso por Tarapoto me dirijo a Chachapoyas. Ando cuatro días, pueblo de los muertos, gran vilaya, Kuelap y al final el agua de Gocta aparece colgada en las alturas como un mundo que va a caer sobre mi cabeza.

“mirar las nubes que pasan por el cielo, como quien llama a una puerta: lenta caravana que migra sobre el desierto azul. Pasan como llevando todas las botellas de tantos náufragos como levanten la vista al cielo. Pasan. Y en ese pasar, cada cual puede leer lo que prefiera: importa tan sólo saber que, en algún lugar, hay también alguien que intentando descifrar toda esa imposible heráldica. Y es cierto que se van. Pero precisamente porque se van, nos acompañan”.

No hay comentarios: